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TOROS EN JEREZ

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Viernes 11 de mayo de 2012

Corrida de toros

FICHA TÉCNICA DEL FESTEJO

Ganadería: Toros de Núñez del Cuvillo (desiguales de presentación, y juego. Se pidió el indulto al cuarto de la tarde de forma inexplicable. De nombre “Pocaropa”, se le dio la vuelta al ruedo, sin que el presidente sacara el pañuelo azul).

Diestros:

El Juli: dos orejas y dos orejas y rabo tras aviso.

El Fandi: dos orejas y ovación.

Jose María Manzanares: oreja y oreja.

Entrada: Tres cuartos de entrada.

Crónicas de la prensa: COPE, ABC, Diario de Jerez, EFE.

COPE

Por Manuel Sotelino. El Juli roza la perfección del toreo

Se guardó un minuto de silencio por D. Salvador García Cebada. Sobrevolaba el sueño de un toro llamado “Pregonero”. Un dije que fue indultado en Jerez en el año 90, por Espartaco. Fue en una corrida del arte del toreo y aquel toro no paraba de embestir. Era un toro encastado, lleno de fuerza y vigor.

Fue un toro que se entregaba ante cada muletazo que daba Espartaco. Nobleza, bravura y codicia a raudales, como le gustaba a D. Salvador que salieran sus toros.

Allá de la finca La Zorrera, donde siempre estaba esperando D. Salvador a los aficionados. Te miraba de arriba a abajo y te radiografiaba con tan sólo una mirada. Y se decía a si mismo: “este es un buen aficionado”, y te levaba al cercado donde tenía los toros de Pamplona. Pero antes había que pasar el examen. Después saltaba, siempre lacónico, alguna de sus prendas. “A ver quién tiene güeros suficientes para ponerse delante de esta tía”. Lo decía, lógicamente, refiriéndose a ala corrida de Bilbao, o a la de Pamplona, o a la de Logroño. Y se reía, el muy pícaro, para los adentros. Ese era D. Salvador García Cebada. Ganadero de postín que ayer nos dejaba para siempre. El ídolo de los Sanfermines, el ganadero siempre respetado. Va por usted, D. Salvador. Que todavía recuerda este cronista cómo un día en un tentadero, me pegó un grito y me dijo: “Venga Manolo, sal ahora afuera a ponerte delante de la vaca que tú largas mucho y demuestras poco. Así que ya sabes a decirnos ahora cómo hay que torear”. Y el cronista salió y toreó a la vaca. Eso sí, con la ayuda de Domingo López Chaves que me amortiguó el golpe. Todavía recuerdo cómo se reía el muy socarrón. Siempre estarás en nuestro recuerdo, ganadero.

Al Juli no hay quien lo pare si su temporada se plantea tal y como estuvo ayer en Jerez. Su primer toro no quiso nunca humillar, y le planteo una faena por abajo. A mitad del trasteo, el toro acabó sometido como una monjita de la Caridad. Su toreo en redondo era el espejo perfecto del dominio Su segundo oponente fue un toro muy distraído y sin fijeza. A este toro al que se le pidió el indulto de forma inexplicable. Son las cosas de Jerez, o mejor dicho, son las cosas de Jerez cuando el fino hace de las suyas. O es el aspiste o en la plaza de toros de Jerez hay menos aficionados que marinos en Suiza. Sin embargo, acabó claudicando ante la muleta demoledora del torero de Madrid. Toreo de gran voltaje por ambos pitones. Desplantes bellísimos, pases de la firma, trincherazos que valían un Imperio. Eso es el toreo: llevar al toro por donde se resiste ir, y además hacerlo con empaque, con gracia, con torería. Borrachera de toreo bueno. No se puede estar mejor.

El Fandi es un torero entregado y necesario en la Fiesta, mas no es exquisito. En su primer toro pegó muletazos que llegaron al público, lo mismo que con las banderillas donde anduvo sobrado. Muletazos van y vienen por ahí, mientras los aficionados piensa en las letras del coche, pero el gran público, ese que pasa por taquilla y mantiene el espectáculo, se lo pasa bomba. Por eso El Fandi es un torero que si no existiera habría que inventarlo.

Su segunda faena fue demasiada larga. Mucho metraje para pocos misterios que contar. Falló con los aceros y tanto esfuerzo se disolvió en la nada. Pero la puerta grande de Jerez ya estaba abierta, gracias a la buena disposición del presidente que sacaba los pañuelos con verdadera fruición. Eso, si no era para Manzanares con el que estuvo el Usía muy severo.

Manzanares estuvo firme ante un toro muy mirón que a la salida de cada muletazo le hacía una radiografía. Miradas que matan, miradas que desnudan el alma, y destapan los terrores. Miradas que se presentan en las pesadillas. Pero Manzanares se repuso ante la mirada del cornúpeta. Se sobrepeso y estuvo por encima de las complicaciones, y al final cortó una oreja que en la plaza de Jerez supo a poco.

Su segundo toro también tuvo complicaciones. No remataba, no tenía continuidad. No acabó de haber el acople necesario, y así fue como no llegamos a ver una tarde redonda de este gran torero de Alicante que está arrasando allá por donde va. Y es que estaba claro que la tarde era del Juli. De El Juli y de D. Salvador, al que echamos de menos en su barrera de sombra.

ABC

<img src="http://www.portaltaurino.com/images/criticos/fdo_carrasco.jpg"/>Por Fernando Carrasco. El Juli corta un rabo en Jerez

Julián López está sediento de triunfos y es por eso que, a las primeras de cambio, arrasa allá por donde pasa. Ayer lo hizo en Jerez, donde dio una dimensión de toreo descomunal, de torero prodigioso, poderoso y capaz de cuajar faenas de una profundidad extraordinarias. No es capaz de saciar esa sed de toreo y por eso, por fortuna para los que tenemos la suerte de verle, convierte cada tarde en algo sublime. Y no le fueron a la zaga sus compañeros de cartel, Fandi y Manzanares, que salieron con él a hombros merced a una buena corrida de Núñez del Cuvillo.

El Juli se las entendió en primer lugar con un precioso jabonero, y el madrileño, que está para llevárselo a casa o ponerle un piso, echó el resto desde el principio. El astado tenía su aquel y se paraba, muchas veces, a mitad del muletazo. No importó a Julián, que lo llevó pulseado a la perfección, aguantando y alargando los muletazos, ora diestros, ora siniestros. Lo exprimió antes de una gran estocada.

El cuarto, imantado, tomaba la muleta y Julián alargaba las embestidas hasta límites insospechados, como una serie al natural prodigiosa. Y luego, sin ceder un solo milímetro de terreno ante los parones, cambiarle el derechazo por el circular invertido y el pase de desprecio convertirlo en natural. Encima del toro, vaciando las embestidas y gustándose. No se puede torear más embraguetado y más de verdad. Faena incontestable, maciza, cumbre. Se pidió el indulto del toro, merecida la vuelta al ruedo. Y dos orejas y rabo. No queda saciado el hambre de triunfo de Julián. ¡Vaya cómo está!

El Fandi, con el segundo, mostró su versión más ortodoxa con la muleta. Antes, lío grande en banderillas. Aprovechó al buen cuvillo en series ligadas y en muchos momentos templadas. Con el quinto, más vulgar.

El tercero no le puso las cosas fáciles a Manzanares, que expuso una enormidad cuajando series de extraordinario mérito. Cada muletazo era un ¡ay! del público. Pero le pudo y encima dejó momentos de profundidad y clase. Ante el sexto tuvo que pelearse con el viento para ligar tandas de mucho mérito. Faltó la continuidad, pero cortó una oreja para sumarse a la fiesta del toreo inmenso de El Juli.

EFE

Por Juan Miguel Núñez. El Juli 4 orejas y un rabo y el Fandi y Manzanares con dos, en Jerez

Al Juli no hay quien lo pare si su temporada se plantea tal y como estuvo hoy en Jerez. Su primer toro no quiso nunca humillar, y le planteo una faena por abajo. A mitad de faena, el toro acabó sometido. Su segundo, muy distraído y sin fijeza al que se le pidió el indulto de forma inexplicable, acabó claudicando ante la muleta demoledora del torero de Madrid. Eso es el toreo: llevar al toro por donde se resiste ir, y además hacerlo con empaque, con gracia, con torería. Borrachera de toreo bueno. No se puede estar mejor.

El Fandi es un torero entregado y necesario en la Fiesta, mas no es exquisito. En su primer toro pegó muletazos que llegaron al publico, lo mismo que con las banderillas donde anduvo sobrado. Su segunda faena fue demasiada larga. Mucho metraje para pocos misterios que contar. Falló con los aceros y tanto esfuerzo se disolvió en la nada.

Manzanares estuvo firme ante un toro muy mirón que a la salida de cada muletazo le hacía una radiografía. Se sobrepeso y estuvo por encima de las complicaciones. Su segundo toro también tuvo complicaciones. No remataba, no tenía continuidad. No acabó de haber el acople necesario, y acabamos sin ver una tarde redonda de este gran torero. La tarde estaba claro era del Juli.

<img width="309px" height="133px" src="http://www.larazon.es/images/uploads/image/f0/f3/373014/c617x266_066mad12fot1.jpg?1336783355">

Diario de Jerez

Por Francisco Orgambides. El Juli impone su toreo y asombra en el coso jerezano

Se había quedado fuera de Valencia, de Sevilla de Madrid… Pero El Juli dio ayer un golpe en la mesa y argumento muy seriamente en Jerez que con él hay que contar y ha dejado una gran tarde en su feudo jerezano.

Fue una fiera. Se le vio en la actitud, la seguridad, la firmeza. Como encaró la tarde ventosa con madurez y fuerza. El Juli se creció con su lote y asombró en Jerez.

Una tarde que comenzó con el minuto de silencio en recuerdo del ganadero Salvador Cebada Gago, uno de los grandes de la fiesta. Hace veintiséis años y dos días le indultaron en esta plaza a un “Pregonero”, último toro que salió con vida de una corrida concurso. Y le pusieron pegas porque en el cuarto puyazo –ha leído bien: el cuarto– volvió la cara.

El toreo ha cambiado. Ayer se pidió el indulto del cuarto, un “Pocarropa” que tomó un puyazo y no tuvo fijeza ni se entregó hasta que El Juli, literalmente, lo embebió en el quite, y rompió el toro de modo extraordinario en la muleta. Un gran toro, de vuelta al ruedo de ley. Ahí estoy con el presidente, aunque perdió la noción del tiempo y salimos de la plaza de noche.

Aparte de que el presidente se dejara el reló en la mesilla de noche, hubo muchas cosas y muy buenas en una tarde que, de salida, puso muy cara El Juli: abrió plaza con tal decisión que no parecía ni que le molestara el viento. Su primera faena fue de dos orejas por disposición, por capacidad lidiadora y por estética: bueno, bonito y caro.

Había atacado mucho a ese primer toro, con mucho sentido y superioridad, eso que llaman sitio y cerrando con un arrimón seco.

Pero si con el primero estuvo extraordinario, a su segundo lo sublimó. No se puede estar mejor. con amplísimo repertorio: ahora cargando la suerte, ahora dejando marcada en la arena la huella de la zapatilla. Templaba la tela y arrastraba media muleta por el albero, dando profundidad al trasteo. Aquel “Quemarropa” ofrecía excelentes embestidas y El Juli le ponía la tela con mucha verdad, seriedad y aplomo. El toro se crecía a la vez que se agigantaba torero, la plaza botaba y el aficionado paladeaba ese toreo cerebral, casi científico, que El Juli rubricaba con remates torerísimos.

La mano muy baja, la muleta arrastrada, los molinetes profundos de tanto como el torero extenuaban la calidad de la humillada embestida del toro. Un torero que parecía que no tenía cuerpo, pero que sumó a esa capacidad lidiadora una limpia estética. Lo dijo bien claro,: aquí estoy yo y soy capaz de esto. Como para no anunciarlo.

El Fandi, como siempre, lo dio todo y al que todo la entrega nada se le puede reprochar. Su oferta torera en la fiesta es otra diferente, más festera, pero no menos honrada. Con su primero estuvo muy bien en todos los tercios, variado y de sensación con los palos ante otro toro noble que no es que viniera a menos, es que se tragó un montón de pases. Su segundo tuvo fases: mejor en los primeros tercios y mejor en la primera fase de la faena de muleta, pero aquello no cobró vuelo.

Manzanares estuvo muy bien en su primero, toro con peligro que medía al torero, mirando y buscando el bulto, una seria amenaza en tres ocasiones. Muy bien el de Alicante, impávido ante el peligro porfiando y embarcando por los dos pitones. El Público se enfadó por la segunda oreja, denegada. El cuarto vino a menos en la muleta y le espació la faena dejándolo respirar, aprovechando lo que tenía el noble animal de un encierro más que propicio.

Imagen: El Juli durante su actuación en la Feria de Jerez de la Frontera. | EFE


Jerez Temporada 2012.

jerez_110512.txt · Última modificación: 2020/03/26 12:20 (editor externo)