En la madrugada del 18 de agosto de 1936, el poeta Federico García Lorca, el maestro Dióscoro Galindo González y los banderilleros Francisco Galadí y Joaquín Arcollas Cabezas, conocido como Magarza, coincidieron en La Colonia, un cortijo de Víznar que había sido convertido por los falangistas en antesala de la muerte. Allí compartieron sus últimas horas de vida antes de ser asesinados. Eran los anarquistas Francisco Galadí Melgar y Joaquín Arcollas Cabezas muy conocidos en Granada, sobre todo en el mundo taurino del que llegaron a ser afamados banderilleros…
Profesionalmente, Joaquín Arcollas (o Juan Arcoyas) estuvo vinculado al mundo de la tauromaquia en Granada a principios del siglo XX, actuando como banderillero en distintos festejos. Se tienen pocas referencias de su trayectoria taurina ya que “apenas nos quedan un cartel taurino en el que son anunciados como banderilleros y unas fotos con capote y traje de luces”.
Tras el alzamiento militar de 1936, Arcollas actuó activamente en defensa de los intereses de la II República en Granada y fue apresado junto a su compañero Francisco Galadí en el barrio del Albaicín, para luego ser juzgados y mandados fusilar.
Según el relato histórico, el banderillero Joaquín Arcollas fue uno de los miembros fusilados en el pelotón en el que se encontraba el poeta granadino Federico García Lorca. Junto a ellos se encontraban, también, el banderillero Francisco Galadí Melgar “El Colores” y el maestro Dióscoro Galindo González.
En 2018, la Confederación General del Trabajo (CGT) se personó como “heredero ideológico” de Arcollas ante la Junta de Andalucía para reclamar el cuerpo del banderillero anarquista, solicitando se realizaran las excavaciones necesarias para hallar los restos mortales del torero y del resto de los compañeros fusilados.6
Históricamente, se contó entre los partícipes de la muerte de los banderilleros Joaquín Arcollas y Francisco Galadí a un compañero de profesión: al novillero Pedro Zarzo Perete, quien supuestamente habría sido jefe de las llamadas Patrullas Negras. Sin embargo, en una entrevista concedida en 1976, Perete desmintió toda la relación con estos hechos ya que, según él, se encontraba en esos momentos en el frente de Loja, donde combatió junto al también novillero Paquito Rodríguez.
La figura de Joaquín Arcollas fue llevada a la televisión dentro de la serie “Lorca, muerte de un poeta” (1987), de Juan Antonio Bardem. El papel del banderillero asesinado fue interpretado por el actor Antonio Iranzo y aparece en el último capítulo (La muerte, 1936), en el que conversan todos los condenados a muerte dentro de la cárcel entre las ironías de García Lorca, intepretado por Nickolas Grace.