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PLAZA DE TOROS DE LA MALAGUETA

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Imagen: El diestro Julián López “El Juli”, durante la corrida picassiana de la Plaza de Toros de la Malagueta. Jorge Zapata | EFE

Domingo, 8 de abril de 2012

Corrida de toros

FICHA TÉCNICA DEL FESTEJO

Ganadería: Toros de Núñez del Cuvillo (justos de presencia, manejables en general).

El Juli. Oreja y oreja.

Miguel Ángel Perera. Vuelta y saludos.

Alejandro Talavante. Saludos y saludos tras aviso.

Crónicas de la prensa: ABC, EFE, La Razón, Málaga Hoy, COPE, Sur, La Razón.


ABC

<img src="http://www.portaltaurino.com/images/criticos/fdo_carrasco.jpg"/> Por Fernando Carrasco.

Lo que nos perdemos en Sevilla y Madrid sin El Juli…

El Juli está que se sale. Ayer lo demostró en Málaga, lejos de Sevilla y de Madrid. Desgraciadamente, eso que nos vamos a perder en la Feria de Abril y en la de San Isidro. Al final, siempre pierde el aficionado… Junto a él, un Talavante sin dejarse ganar la pelea ante el mejor lote.

No se empleó de salida el que abrió plaza. A pesar de ello, Julián lo intentó con el capote. El de Cuvillo iba a lo suyo. No se entregaba nunca. Sí, en cambio, el torero, que comenzó doblándose con el astado para someterlo y fijarlo. Labor inteligente que tuvo como recompensa dos series diestras largas en las que lo hizo todo el madrileño. Tiraba de su enemigo para llevarlo por donde no quería. Pero lo mejor vino a izquierdas, con otras dos series lentas y parsimoniosas, llevando embebido al soso cuvillo. Finalizó con un circular de espaldas —vuelta a la diestra— cambio de mano y dos trincherillas. Todo por encima de lo que permitía el animal. Sobrado Julián, que lo tumbó. Oreja a ley. Cabeza privilegiada

Le quedaba su segundo. Bien a la verónica tanto en el recibo como en un quite con respuesta de Perera. Juli que brinda al respetable para firmar un inicio de faena a pies juntos, por alto, sin moverse, y vaciar las embestidas de manera prodigiosa. Y después, recital a diestras, donde el toro iba cosido a la pañosa en muletazos largos, muy largos; pletóricos. Qué manera de torear y de entender al toro. Cabeza privilegiada en las distancias, los toques y la forma de torear. Lo que nos vamos a perder en Sevilla y en Madrid, por Dios. Y al natural más de lo mismo. Faena que acabó en la distancia corta, haciendo pasar al cuvillo como quería. El descabello le privó de las dos orejas pero no del momento en que está.

A pies juntos recibió Perera a su primero, ganando terreno siempre. Protestó mucho durante toda la faena el toro. A pesar de ello, Miguel Ángel le plantó cara en los medios. Primero con pases por alto sin enmendar la figura y luego intentando que pasase su oponente, que lo dando cabezazos. Colada por el izquierdo y a acortar distancias. Por encima.

Protestó el público al quinto, que no anduvo sobrado de fuerzas. Intento de Perera por sacar faena, pero si le obligaba el animal no iba. Sólo la voluntad.

Talavante también recibió a pies juntos al tercero, el mejor del encierro a la postre, entremezclando chicuelinas. Y construyó una faena maciza, plena, que comenzó con estatuarios en medio del ruedo para luego hacerse con el toro en series diestras ligadas y largas. Y mejor aún con la zurda. Siempre en los medios, los naturales fueron lentos y suaves, dándole distancia. Un trasteo macizo donde el extremeño estuvo muy a gusto, rematando con bernadinas cambiando de pitón. Estoico Talavante que, sin embargo, marró con los aceros una faena de mucha altura.

Chico fue el sexto de presencia. Pero como su primero, también embistió. Centrado Talavante, de nuevo en los medios, cuajó un trasteo de menos a más, donde el toreo al natural alcanzó una gran dimensión. Muy metido en la faena, exprimió a su buen oponente… y otra vez pinchó.

Que sí, que lo que nos vamos a perder en Sevilla y en Madrid sin El Juli…


<img width="322px" height="205px" src="http://abcdesevilla.es/Media/201204/09/juli-malaga--644x410.jpg">

EFE

El Juli corta dos orejas en la corrida de Resurrección de Málaga

El diestro Julián López El Juli ha sido el triunfador del festejo celebrado esta tarde en la plaza de toros de La Malagueta en el que también ha brillado a buen nivel Alejandro Talavante con una interesante corrida de Núñez del Cuvillo.

Se lidiaron seis toros de Nuñez del Cubillo desiguales de presentación y de buen juego, excepto el segundo y el quinto. Destac el gran tercero. El Juli: estocada (oreja) y estocada y descabello (oreja). Miguel Angel Perera: estocada (vuelta al ruedo) y pinchazo hondo y descabello (ovación) Alejandro Talavante: dos pinchados y estocada (ovación) y media estocada y dos descabellos (ovación). La plaza registró dos tercios de entrada en una tarde agradable.

El Juli ha sido el gran triunfador de la corrida en la que ha reivindicado su condición de figura del toreo tras quedarse fuera de las principales ferias del inicio de la temporada. Así, mostró una gran predisposición que le valió para pasear un trofeo del primero de sus oponentes, un animal al que cuido de inicio para terminar exigiéndole por ambos pitones.

En su segundo, más colaborador, enseguida le bajo la mano para desarrollar una importante faena con mucha profundidad en la que destacaron las tandas de naturales. Sorprendió Alejandro Talavante en el tercero, un extraordinario toro que no se canso de embestir y al que planteo una faena firme a la que solo le faltó la rubrica de la estocada.

En el ultimo por su parte desarrollo una labor mas técnica para mantener en pie a un burel falto de fuerza. El peor lote fue el de Miguel Ángel Perera que optó en ambos casos por el arrimón al no encontrar otras posibilidades. Dio una vuelta al ruedo en su primero.

Imagen: Jorge Zapata | EFE


LA RAZÓN

El Juli triunfa en Málaga tras cortar dos orejas

El Juli cortó una oreja a su primer oponente de Cuvillo tras cuajar tres tandas en redondo de mando y mano baja así como varias al natural que aunaron temple y profundidad. La estocada ayudó a la concesión del trofeo, según informa mundotoro.com.

La otra oreja cayó en el cuarto, un animal que tuvo ritmo en sus embestidas al que toreó El Juli despaciosamente ante de exprimirlo con circulares. La estocada cayó trasera pero no fue óbice para la concesión del trofeo que le abría la puerta grande de la Malagueta al torero madrileño. Puerta que no sobrepasó a hombros al negarse El Juli a salir en volandas.

El peor lote fue sorteado por Miguel Ángel Perera. Su primero, áspero y violento, le sirvió para pegarse un arrimón final lleno de poder. Dio la vuelta al ruedo como premio. El quinto se paró por su falta de raza y fuerza y dejó sin opciones al extremeño.

Completaba el cartel Alejandro Talavante, que estuvo variado con el capote en su primer toro. Talavante creó una faena variada que tuvo en el toreo al natural lo más destacado. Pinchó y se quedó sin premio. El sexto se movió sin clase y pese a la insistencia del torero extremeño, el acoplamiento no fue el mismo.


<img src="http://media.grupojoly.com/imagen.php?imagen=//0001073000/0001073182.jpg&an=335"/>

MÁLAGA HOY

Por Marta Jiménez. La espada, un arma de doble filo

Por algo lo llaman la suerte suprema. El estoque es el martillo más imparcial a la hora de impartir justicia en el ruedo. Que se lo pregunten a Alejandro Talavante que vio como su esportón se iba vacío, cuando presumiblemente iba a pasar lo contrario, por culpa de su mal acierto con los aceros. En su primero, el tercero de la tarde y de nombre Galiano, dio a entender al público que era consciente de que allí había que batirse el cobre de verdad. El extremeño realizó una faena de capa que fue un alarde de plasticidad. Lo mismo que la réplica del Juli en el quite por chicuelinas, muy ajustadas.

Brindó su faena al público y al cielo. Y en el cielo alguien pensaría “Siempre creí en ti, dijeran lo que dijeran”. Y ayer creíamos todos. Con la muleta realizó una grandísima faena muy cabal y con mucho dominio que encandiló al público desde el inicio. Por naturales sucedió lo mismo y además el toro humillaba que daba gusto. El ambiente iba subiendo y Talavante también se creció. Como el toro seguía teniendo fondo, el lo aprovechó. La maestría y la lentitud cuajaron hasta que comprobó que el animal no daba más de sí, ya había dado mucho, y de forma inteligente pidió la espada. Antes culminó el deleite por manoletinas y con ese pase tan suyo de enseñar el pico de la muleta por la espada. Una faena muy madura que hizo que ya casi estuviera acariciando el pelo, pero se disipó al primer pinchazo. Fue una desazón colectiva, incluido el propio diestro. Con el fin de que el toro no se enfriara, ni el público tampoco, quiso entrar a matar de nuevo rápidamente y otra vez pinchó. Qué coraje. A la tercera fue la vencida. Lástima que aunque fuera una estocada caída, no hubiera sido así a la primera. Aún así, la ovación fue cerrada.

En su segundo turno, Talavante salió a por todas. Su enemigo salió un poco despistado pero él lo templó pronto con el capote. El toro no tenía mucha entrega pero el extremeño sí, y a fuerza de tesón, consiguió sacarle partido por los dos pitones. Era una faena curiosa que se hubiera completado bien con la espada, pero, de nuevo, no fue bien. Una media estocada, un descabello y un aviso, dejaron en palmas lo que podía haber sido, quizá, algo más.

Pero la tarde la habría Julián López El Juli, el único que tocó pelo en la tarde. Venía con muchas ganas. Así lo había expresado por activa y por pasiva y la verdad es que demostró que era verdad. En su primer toro le dio vida a un catálogo de técnica. Gracias a eso el toro fue lo que fue. Es más, funcionó como El Juli quería , y necesitaba, que funcionase. Se podía permitir ese lujo y así lo hizo. Al principio de la faena prefirió no obligarlo mucho para ir marcándole el ritmo. En la segunda tanda y le dio su tiempo y la faena fue ganando enteros. El madrileño desplegó un gran temple por naturales y lo fue llevando al compás preciso. Al final de su faena, hizo un cambio de mano extraordinario para culminar con una tanda de molinetes. Por naturales se lo llevó al tercio y clavó una estocada tendida y caída que encima degolló al animal. Entre que la espada no fue limpia y que el capote fue más efectivo que artístico, sólo cortó una oreja.

En su segundo toro, y cuarto de la tarde, El Juli sabía que no podía relajarse. Sobretodo porque justo antes Talavante, en su primero, había formado un lío, pero ya en el capote se notó que El Juli iba a luchar y estuvo muy correcto. Ya en la faena de muleta se creció mucho más y le cogió muy pronto el rimo al toro y por naturales demostró un grandísimo poder y puso toda su voluntad y sabiduría. Una estocada caída, un descabello y una oreja.

Por su parte, Miguel Ángel Perera se enfrentó, sin duda, al peor lote de la tarde. Aún así, nadie puede negar ni el valor, ni la quietud, ni la voluntad que siempre pone este torero. Ante su primer enemigo gustó y se gustó mucho con el capote aunque el quite por gaoneras que ejecutó posteriormente no fue demasiado ortodoxo. El animal era muy violento y tenía muy poca transmisión. Hacía que la faena se enfriara a pesar de las buenas intenciones del otro extremeño de la terna. Un pundonor que el público apreció y valoró mucho. De nuevo una estocada que degolló al toro. A la caída del de Núñez del Cuvillo, una gran ovación y una leve petición de oreja. También hubo algún pito al palco por no conceder el trofeo. Perera dio la vuelta al ruedo.

La puntilla de su mala suerte con el lote la puso el quinto ejemplar que hasta fue pitado en su arrastre. Estuvo bien con el capote y con la muleta se llevó el animal hasta los medios y dio una tanda con mucha clase. Pero donde no hay mata, no hay patata y el toro no daba más de sí. Un pinchazo hondo y un descabello. Aún así, bravo por Perera.

Imagen: Javier Albiñana | Málaga Hoy


LA RAZÓN

El Juli, triunfo con reivindicación en el Domingo de Resurrección de Málaga

Julián López «El Juli» salió ayer a hombros de la plaza de toros de La Malagueta tras cortar un apéndice a cada uno de sus toros, convirtiéndose de esta manera en el triunfador del Domingo de Resurrección en el coso taurino de la Costa del Sol, mientras que sus compañeros Miguel Ángel Perera y Alejandro Talavante no tuvieron la suerte del torero madrileño y se fueron de vacío.


SUR

Por Antonio M. Romero. El Juli corta dos orejas y reivindica en Málaga su condición de máxima figura

El Juli ha tenido un inicio de temporada atípico al quedarse fuera de las primeras grandes ferias (Valencia, Castellón, Sevilla y Madrid). Una ausencia consecuencia de su postura en defensa de los derechos televisivos de los toreros. Por eso, la corrida del Domingo de Resurrección en Málaga, era una piedra de toque fundamental ya que el diestro madrileño era consciente de que muchos ojos iban a estar puestos en su actuación en esta plaza de primera categoría. El Juli, ayer, salió al ruedo de La Malagueta con una gran disposición, dio la cara en dos soberbias faenas que le permitieron cortar sendas orejas -una de cada toro- y reivindicó su condición actual de máxima figura de la fiesta nacional.

En el primero de la tarde, un toro que flojeo y manseó, los primeros tercios pasaron sin nada reseñable ya que El Juli lo cuidó para que llegara a la muleta con algunas garantías para el triunfo. A base de llevarlo muy tapado dejándole la muleta en la cara entre muletazo y muletazo lo fue metiendo en la canasta. El trasteo fue de menos a más consiguiendo buenas tandas por ambos pitones donde hubo largura y profundidad. Una serie al natural fue extraordinaria. El Juli exprimió a 'Pegajoso' hasta la última embestida. En el epílogo del trasteo tiró de recursos como un circular invertido con cambio de mano incluido y dos trincherillas de gran sabor. Mató de una estocada.

Al cuarto, un animal noble y más colaborador, lo recibió con un buen ramillete de verónicas y el remate de una media con gran sabor. En este toro el diestro madrileño salió a por todas buscando la puerta grande 'Manolo Segura'. Dejó un quite con dos verónicas y una media de enjundia. Tras brindar la muerte de 'Ventoso' al público, El Juli inició la que iba a ser una extraordinaria faena con tandas por ambos pitones donde hubo mano baja, mando y poderío, largura, profundidad y ligazón. Circulares invertidos ligados con muletazos y pases de pecho provocaron que los tendidos se entregaran al magisterio del torero. Todo hacía presagiar triunfo grande, pero la estocada cayó algo trasera y eso hizo que el toro tardará en caer y que tuviera que propinarle un golpe de descabello para acabar con el burel.

A un gran nivel

Alejandro Talavante estuvo a un gran nivel en Málaga. El diestro extremeño firmó su mejor faena en La Malagueta, aunque el fallo con los aceros le privó de salir a hombros del coso del paseo de Reding.

El acontecimiento tuvo lugar en el tercero de la tarde, el mejor de los toros de Núñez del Cuvillo, que no se cansó de embestir. El diestro lo recibió con verónicas a pies juntos, rematadas con otras tres medias y una revolera. 'Galiano', de 490 kilos, el de menor peso del encierro, cumplió en el caballo. El Juli entró al quinte reglamentario por chicuelinas.

Tras brindar al público, Talavante se situó en el centro del ruedo y desde allí citó de lejos al toro, que se arrancó con alegría, para instrumentarle cuatro estatuarios con las zapatillas clavadas en el nuevo albero de La Malagueta. A partir de ese momento comenzó un trasteo de alto vuelos por ambas manos a la que contribuyó la embestida boyante del Núñez. El diestro extremeño construyó una faena de emoción, mando y, en algunos momentos, originalidad con pases inverosímiles. Con el público entregado, entró a matar. Tras dos pinchazos, dejó una estocada algo trasera y las dos orejas se esfumaron.

A buen seguro que hubiera disfrutado, y mucho, de esta faena el crítico taurino recientemente fallecido José María Vallejo, un apasionado del toreo de Talavante. Queda el consuelo de que quizás viera este trasteo desde el tendido del cielo.

Al último de la tarde, segundo de su lote, Alejandro Talavante lo recibió por verónicas de un tono menor. 'Pajarillo' dio síntomas de falta de fuerzas y el diestro construyó una faena a base de mucha técnica para conseguir algunos muletazos estimables, pero sin la emoción de su primer trasteo. Mató de media estocada algo trasera y necesitó dos descabellos para finiquitar al burel.

El peor lote de la tarde le correspondió a Miguel Ángel Perera, que solo pudo dejar constancia de sus ganas de agradar. El diestro de La Puebla de Prior acudió a Málaga con muchas ganas y con el deseo de reivindicarse ya que también está sufriendo la ausencia de algunas ferias.

En su primero, un toro tardo en la embestida, inició la faena de muleta con pases por alto a pies juntos y luego intentó el toreo por ambas manos pero el toro no colaboró. Se pegó el arrimón. Mató de estocada casi entera. En el quinto poco pudo hacer ante un toro soso. Mató de pinchazo hondo y un descabello.


Málaga Temporada 2012

malaga_080412.txt · Última modificación: 2020/03/26 12:25 (editor externo)